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nadie barniza sino quiere ocultar algo

A mi me gustan los hombres por como suenan

Si además son morochos, flacos, altos, de ojos oscuros y con mucho pelo lacio y desprolijo, tipo Benicio del Toro; mejor. Pero mi fetichismo pasa por las palabras y por los sonidos. Hasta mi primer novio lo debe haber sospechado, porque era tan petiso y más feo que Charles Aznavour. Pero para cuando lo conocí ya me había enamorado por teléfono. Se ve que un día me conoció, quedo fascinado, averiguó mi número y se tomó el trabajito. Supongo que eso es buena explotación de recursos.

Pero todo esto viene a cuento que estoy buscándole nombres a mis amigas y otras gentes para no escracharlos en este weblog. Pero siento que parte del encanto de los relatos puede esfumarse porque no doy con la música adecuada. Y como decía mi amigo Horacio -que ya no está entre nosotros así que puedo nombrarlo- (ya no está entre nosotros porque un día le agarró un brote psicótico y se fue a vivir al sur, no sé entre quienes estará) yo escribo con música. Fue la única persona que la escuchó. Como sea siento que todavía no la acierto con los nombres. Así que por ahí algunos van cambiando.

Creo que tengo algunos aciertos como Mabel, porque me da justo con la boya. La Emperatriz, porque así la llama un amigo del club, y para un grupo es identificable. Y además porque se comporta, como una emperatriz.

A Flora, porque lo eligió ella. Se lo pedí porque siempre le pone nombre geniales a las cosas, a los perros, a los campos... Y el otro día, me llamó gritando ¡Flora, Flora! soy como "la gata Flora". Pero me parece que lo voy a cambiar por Gata. Porque además es mala y ladina como una gata. Que en Argentina no es lo mismo que "un gato". O tal vez la India, porque es medio salvaje.

Así que este domingo mientras tomaba sol, me dedique a reflexionar sobre la teoría de Lacan "el sujeto escindido por el significante", la importancia de las personas y sus nombres, dónde estarán los restos de Colon y lo bien que viene creciendo el pasto.

Ya veré que decido. Porque aún me queda por involucrar a mucha gente... Mientras tanto agregué un pequeño diccionario argentino-español. Las palabras subrayadas que no cambian de color al pasarles con el mouse tienen explicación. Casi suena como un verso que horror...

2 comentarios

Lola -

Te descubrí sos la Cautiva, buscale nombre a tu novio porque llamarlo "Pelota" me parece un espanto

Mishifuz -

Lola: es verdad lo que decis de la musica de los nombres, por eso los musulmanes no nombran a Dios... creo...
Pero me parece que cada persona es nombrable, salvo Bush, obviamente que me parece innombrable por lo bestia...
Le encontraste nombre a tu amiga? y a su novio?