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nadie barniza sino quiere ocultar algo

La Conversación con Autora

Fue un desastre. Yo tan fascinada con la historia pensé que ella se iba a enganchar en toda esta cadena de casualidades. Y que nuestra conversación se iba a convertir en una serie de onomatopeyas, exclamaciones y carcajadas intercaladas, circunstancialmente por alguna frase tipo ¿a vos también? Y nos íbamos a cagar de risa juntas.

Nada más lejos. Será que la desubicada soy yo que no sé de qué me río. Pero prefiero ser desubicada. Autora todavía lo llora, y eso que la historia le pasó hace años. Con una voz de tono melodramático que acompaña muy bien sus relatos, no voy a exagerar que casi logra deprimirme. Pero de lo único que me dieron ganas fue de terminar la conversación lo antes posible. Ya sabía lo más importante la historia era real.

No entiendo, si yo hubiese escrito un libro, con una historia verídica y un día alguien se toma el trabajo de localizarme para contarme que vivió el mismo enredo estaría encantada. Pero esta mujer no.

No dejaba de repetir “para mí fue devastador”. Sí le digo, pero escribiste que la pasaste muy bien... Y ella no escuchaba nada y seguía repitiendo “para mi fue devastador”. Me cansó. Le puse fin al embolante y reiterativo monologo. Ella se despidió diciéndome que si la necesitaba la volviera a llamar. Como si la necesitara para llorar. Ni en pedo.

Ya que andaba por la guía telefónica, me puse a buscar el apellido del Gallego por Berazategui. Y hablé con la madre. Que no tiene la más puta idea del hijo. Bué, con madres así, pasan las cosas que pasan reflexioné. Y me fui a dormir.

5 comentarios

Lola -

Si San, y bien que pagué por ellos. En la optica me los ajustaron gratis, y me quedan barbaros

San -

Vaya!!! y yo digo que mi vida es rara... mi madre!!! por lo pronto tienes lentes nuevos =D

Lola -

Y otra cosa, eso de que el pibe me haya pedido que le guardara los anteojos en la cartera ¿lo habrá hecho con la intención de después robarme?. Onda, deja que los busco yo... Digo esto después de haber leido el cuento. Porque es raro, ¿para que me pidió que los guardara en la cartera?

Lola -

Buena pregunta, pruebas científicas no hay. El de ella se llamaba Alejo. El mío Carlos. Lo de Carlos es verdad porque yo vi el DNI y además recordé el apellido, porque es fácil, aunque no muy común. Pero el tipo es mentiroso y son demasiadas las casualidades, yo creo que sí que es el mismo. A esta altura me cuesta más creer que dos tipos tan similares físicamente anden por ahí utilizando el mismo método a que sea el mismo. A ella le dijo que tenía empresas y negocios muy importantes. A mí que venía a hacerse cargo de los campos de los padres. Lo que no entiendo porque se volteó a esa dramática y a mi no. Porque doy fe que el pibe estaba muy cachondo. El lunes le preguntaré a mi analista.

turista -

tienes razon, que desilusion de Autora!! esperaba alguna pista. me queda una duda ¿era el mismo tio?