El señor del coágulo II
La comida fue un éxito. Gracias a la locuacidad y simpatía de Cautiva y el Conde. El pibe obviamente de campo, encontró dos buenos interlocutores en mis queridos amigos. Y la verdad por momentos sentí una cierta nostalgia de poder llegar a tener una pareja con la que compartir momentos así.
Fue ahí cuando nos contó que es de Río Colorado y que odia Buenos Aires, (ja) pero que estaba por el problema del coagulo que le había salido en una vena que corre por el hombro luego de un choque de autos donde el iba con unos amigos. (Los nenes se llevaron puestos tres jabalíes. Y ni siquiera hicieron un asado.)
Para su beneplácito Cautiva tiene varios años de medicina así que comprendió la gravedad del cuadro: literalmente el coagulo puede desplazarse hacia cualquier parte, el cerebro, los pulmones, en fin lo que sea y así como así: matarlo
Aunque, no voy a negar, tuve que superar uno que otro comentario horrísono. Por ejemplo uno de esos refranes de campechano resentido de los más, pero más trillados. Esas palabras que hubiese preferido no escuchar NUNNNNNNNNNNNNCA PERO NUNNNNNNCA JAMAAAAAAAASSS en la vida.
Vo sabé como eh to hermano, dioh está en todah parteh pero atiende en Bueno Haires.
(Lo que significa: Dios está en todas partes pero atiende en Buenos Aires)
(El gauchito Gil me perdone por faltar a mis creencias y fetichismos más profundos, pero el pibe era un bombón. La verdad, me quería maaaa-tar).
Salvando esos pequeños detalles, todos nos sentíamos tan cómodos que rápidamente empezaron los comentarios más disparatados de mis amigos, del tipo:
Cautiva: Nos vamos a comprar una lancha para el próximo verano. En realidad nos pasamos comprando cosas con la imaginación. Pero después algunas las compramos de verdad ¿no mi amor?
Conde: Así nos queremos comprar una lancha para ir por los lagos del sur, pero a los lugares más alejados más tranquilos ¿Vos que tenés que hacer en el verano?
Coagulo: Que se yo flaco, estamos en agosto !!!
Coagulo: Pero bueno dejemos de hablar de campo porque si no Lola se va aburrir.
Cautiva: Ah nooooo, Lola ya sabe mucho de campo, yo le enseñé mientras íbamos a caballo y ella me preguntó por las plantaciones... No Lola, estos son cultivos, cultivos de soja. Las plantaciones son las de cocaína en Colombia.
Y ahí metí bocadillo. Porque al parecer mi top onda Pocahontas que me había comprado en Guatemala y estaba estrenando no era suficiente.
Lola: Ah yo conozco Río Colorado.
Cóagulo: ¿Así? ¿Cuándo fuiste?
Lola: Hace cuatro años. Estuve de vacaciones en México y conocí a un francés. A los meses me vino a ver a Buenos Aires. Y bueno ahí me contó que su mamá le había dicho que unos tíos abuelos de él habían fundado un pueblo en la Argentina. Que se llamaban Burnichón. Y bueno me fije en Internet y encontré que habían sido los fundadores de Río Colorado. Así que fascinada le dije. Esto es fantástico, es justo en la provincia de Río Negro donde empieza la Patagonia, y además la casa de tus tíos abuelos aún existe. Incluso hablé con una descendiente de ellos que no vive en la casa, pero que podría vernos. Son 1200 kilometros, ¿por que no nos tomamos un avión hasta Bahía Blanca y desde ahí alquilamos un auto para hacer los 200 kilometros restantes, pasamos por la provincia de Buenos Aires, La Pampa y entramos en la legendaria Patagonia.?
(Decime San si no es una historia para seducir a cualquiera, otro día entro en los detalles del francés, porque son especimenes muy raros, y yo algo tenía que inventar, una cosa era unos días con el frances en D.F y otra, muy otra, tenerlo al asexuado belga (como lo llamaba despectivamente Mr. Freud) acá. Tenía que entretenerme)
Y bueno, ahí nos pusimos a hablar de la casa de su actual dueño, un viejo muy raro. Los chicos aprovecharon para irse y dejarnos solos.
Una vez solos, comenzó nuevamente la indecisión de Coagulito. Qué si íbamos a tomar algo a otro lado. Que el había estado en otros lugares cercanos pero que estaban llenos de gatos. Que si nos veíamos mañana. Que si yo tenía o no auto. Que él estaba con el tema de los amigos. Que si yo le daba mi telefono a todo el mundo. Uffffff (no le dije mientras pensaba para eso la tengo a Cautiva que es la valiente)
Dejó de hablar. Miró mi expresión y me preguntó: ¿sos una mina de carácter, no?. Si, respondí. ¿De carácter fuerte, no?, insistió. No, -aclaré- de carácter de mierda. (Eso sí con una sonrisa)
Me preguntó que quería hacer yo, y después de sonsacarle con terrible esfuerzo algo que me diera una pista, le pregunté sin más si podía tener sexo, con el tema del brazo y el coagulo. Me respondió terminante: No el médico me lo prohibió.
OOOOOOOOkkkkkkkkkkkeeeeeeeeeeeeeeeeeeeyyyyyyyyyyyyyyy.
En fin salimos, rumbo a no sé donde. Ahí se puso a hablar con sus amigos que nunca acababan de llegar de Pergamino, no sé si por lo jabalís o qué y me dijo de ir a su departamento una horita a tomar un café y que lo bancara que llegaran sus amigos.
(Y yo pensé, má si es su riesgo el pibe es grande y sabe lo que hace)
Una vez en su casa me mostró su codo ortopédico y tooooodas, pero todas las ecografías que le habían hecho. Yo le preparé un café horrible y frío. Volvió a mirar mi cara y me empezó a apretar.
No había marcha atrás.
LLegamos a la cama bastante tarde:
Lola: Tenes forros?
Coagulito: Me dijo el médico que no me agitara
Lola: Que no te agitaras o que no hicieras esfuerzos... porque que yo sepa "agitado" ya estás, yo puedo poner garra.
Ahí fue a buscar los forros (Y sí flaco pensé yo... ¿de que estamos hablando si estás re al palo?, y de paso entendí un refrán de Cautiva "para temprano es tarde".)
Mantuvimos un apasionado romance de dos horas mínimo.
El problema fue cuando salí de la ducha. Yo toda muy contenta, feliz con el polvazo exclamando ¡¡¡¡es la primera vez que lo hice con alguien de campo!!!!. Y entonces puse el freno y me lo encontré a él, pálido mirándose al espejo, con su brazo enfermo del tamaño del doble del otro.
Ahí, como en la cama nos volvimos a poner de acuerdo. Repetíamos sin parar: dios mío, dios mío, dios mío.
Yo llamé un taxi. El al médico. Me despidió con un te llamo mañana. Yo le respondí con una interrogación ¿sí?
Ahora a votación:
a) llamó
b) llamó por amor
c) llamo para reprocharme
d) no llamo
e) no llamo porque es argentino
f) no llamó porque el coágulo lo mató
(continuará)
Fue ahí cuando nos contó que es de Río Colorado y que odia Buenos Aires, (ja) pero que estaba por el problema del coagulo que le había salido en una vena que corre por el hombro luego de un choque de autos donde el iba con unos amigos. (Los nenes se llevaron puestos tres jabalíes. Y ni siquiera hicieron un asado.)
Para su beneplácito Cautiva tiene varios años de medicina así que comprendió la gravedad del cuadro: literalmente el coagulo puede desplazarse hacia cualquier parte, el cerebro, los pulmones, en fin lo que sea y así como así: matarlo
Aunque, no voy a negar, tuve que superar uno que otro comentario horrísono. Por ejemplo uno de esos refranes de campechano resentido de los más, pero más trillados. Esas palabras que hubiese preferido no escuchar NUNNNNNNNNNNNNCA PERO NUNNNNNNCA JAMAAAAAAAASSS en la vida.
Vo sabé como eh to hermano, dioh está en todah parteh pero atiende en Bueno Haires.
(Lo que significa: Dios está en todas partes pero atiende en Buenos Aires)
(El gauchito Gil me perdone por faltar a mis creencias y fetichismos más profundos, pero el pibe era un bombón. La verdad, me quería maaaa-tar).
Salvando esos pequeños detalles, todos nos sentíamos tan cómodos que rápidamente empezaron los comentarios más disparatados de mis amigos, del tipo:
Cautiva: Nos vamos a comprar una lancha para el próximo verano. En realidad nos pasamos comprando cosas con la imaginación. Pero después algunas las compramos de verdad ¿no mi amor?
Conde: Así nos queremos comprar una lancha para ir por los lagos del sur, pero a los lugares más alejados más tranquilos ¿Vos que tenés que hacer en el verano?
Coagulo: Que se yo flaco, estamos en agosto !!!
Coagulo: Pero bueno dejemos de hablar de campo porque si no Lola se va aburrir.
Cautiva: Ah nooooo, Lola ya sabe mucho de campo, yo le enseñé mientras íbamos a caballo y ella me preguntó por las plantaciones... No Lola, estos son cultivos, cultivos de soja. Las plantaciones son las de cocaína en Colombia.
Y ahí metí bocadillo. Porque al parecer mi top onda Pocahontas que me había comprado en Guatemala y estaba estrenando no era suficiente.
Lola: Ah yo conozco Río Colorado.
Cóagulo: ¿Así? ¿Cuándo fuiste?
Lola: Hace cuatro años. Estuve de vacaciones en México y conocí a un francés. A los meses me vino a ver a Buenos Aires. Y bueno ahí me contó que su mamá le había dicho que unos tíos abuelos de él habían fundado un pueblo en la Argentina. Que se llamaban Burnichón. Y bueno me fije en Internet y encontré que habían sido los fundadores de Río Colorado. Así que fascinada le dije. Esto es fantástico, es justo en la provincia de Río Negro donde empieza la Patagonia, y además la casa de tus tíos abuelos aún existe. Incluso hablé con una descendiente de ellos que no vive en la casa, pero que podría vernos. Son 1200 kilometros, ¿por que no nos tomamos un avión hasta Bahía Blanca y desde ahí alquilamos un auto para hacer los 200 kilometros restantes, pasamos por la provincia de Buenos Aires, La Pampa y entramos en la legendaria Patagonia.?
(Decime San si no es una historia para seducir a cualquiera, otro día entro en los detalles del francés, porque son especimenes muy raros, y yo algo tenía que inventar, una cosa era unos días con el frances en D.F y otra, muy otra, tenerlo al asexuado belga (como lo llamaba despectivamente Mr. Freud) acá. Tenía que entretenerme)
Y bueno, ahí nos pusimos a hablar de la casa de su actual dueño, un viejo muy raro. Los chicos aprovecharon para irse y dejarnos solos.
Una vez solos, comenzó nuevamente la indecisión de Coagulito. Qué si íbamos a tomar algo a otro lado. Que el había estado en otros lugares cercanos pero que estaban llenos de gatos. Que si nos veíamos mañana. Que si yo tenía o no auto. Que él estaba con el tema de los amigos. Que si yo le daba mi telefono a todo el mundo. Uffffff (no le dije mientras pensaba para eso la tengo a Cautiva que es la valiente)
Dejó de hablar. Miró mi expresión y me preguntó: ¿sos una mina de carácter, no?. Si, respondí. ¿De carácter fuerte, no?, insistió. No, -aclaré- de carácter de mierda. (Eso sí con una sonrisa)
Me preguntó que quería hacer yo, y después de sonsacarle con terrible esfuerzo algo que me diera una pista, le pregunté sin más si podía tener sexo, con el tema del brazo y el coagulo. Me respondió terminante: No el médico me lo prohibió.
OOOOOOOOkkkkkkkkkkkeeeeeeeeeeeeeeeeeeeyyyyyyyyyyyyyyy.
En fin salimos, rumbo a no sé donde. Ahí se puso a hablar con sus amigos que nunca acababan de llegar de Pergamino, no sé si por lo jabalís o qué y me dijo de ir a su departamento una horita a tomar un café y que lo bancara que llegaran sus amigos.
(Y yo pensé, má si es su riesgo el pibe es grande y sabe lo que hace)
Una vez en su casa me mostró su codo ortopédico y tooooodas, pero todas las ecografías que le habían hecho. Yo le preparé un café horrible y frío. Volvió a mirar mi cara y me empezó a apretar.
No había marcha atrás.
LLegamos a la cama bastante tarde:
Lola: Tenes forros?
Coagulito: Me dijo el médico que no me agitara
Lola: Que no te agitaras o que no hicieras esfuerzos... porque que yo sepa "agitado" ya estás, yo puedo poner garra.
Ahí fue a buscar los forros (Y sí flaco pensé yo... ¿de que estamos hablando si estás re al palo?, y de paso entendí un refrán de Cautiva "para temprano es tarde".)
Mantuvimos un apasionado romance de dos horas mínimo.
El problema fue cuando salí de la ducha. Yo toda muy contenta, feliz con el polvazo exclamando ¡¡¡¡es la primera vez que lo hice con alguien de campo!!!!. Y entonces puse el freno y me lo encontré a él, pálido mirándose al espejo, con su brazo enfermo del tamaño del doble del otro.
Ahí, como en la cama nos volvimos a poner de acuerdo. Repetíamos sin parar: dios mío, dios mío, dios mío.
Yo llamé un taxi. El al médico. Me despidió con un te llamo mañana. Yo le respondí con una interrogación ¿sí?
Ahora a votación:
a) llamó
b) llamó por amor
c) llamo para reprocharme
d) no llamo
e) no llamo porque es argentino
f) no llamó porque el coágulo lo mató
(continuará)
9 comentarios
Lola -
me encantó....
Ahora a vos Cautiva, dejame una ilusión....
Cautiva -
San -
esperó hasta las doce... entonces se impacientó y estuvo marcando varias veces, al mismo tiempo estuvieron los de la morgue intentando llamarle, pero sonaba ocupado jaja =P
¿Y al final? ¿que paso?
Lola -
Lola -
brrrrr que frío!!!!
puedo votar más de una opción???
Cautiva -
A) Llamaste una vez
B) dejaste mensaje
C) llamaste varias veces
D) ya te olvidaste del bombon
E) Tiraste el telefono para no tentarte
F) te llamaron de la morgue
G) no escribis mas porque te fuiste a vivir con el a la Patagonia y te congelaste de frio
San -
(paciencia, paciencia, soooospiro)
Está bien, está bien...
Descarto B definitivamente, ¿qué pasooo? ¿llamo antes de que el coagulo lo matara? :S
Lola -
Sigan asì que uno de estos dias no escribo mas
Cautiva -